Are americans stupid?

Desde el punto de vista de un europeo parece increíble que después de los cuatro años que han llevado los estadounidenses hayan podido elegir como presidente a George W. Bush. Observad que he dicho elegir y no reelegir ya que, ciertamente, la vez anterior no accedió al cargo por el voto popular, sino como consecuencia del retorcido sistema electoral norteamericano.

Haciendo un análisis desapasionado, (cosa que, podéis creerme, me cuesta), es difícilmente explicable el resultado de las elecciones del pasado martes. En el área económica, Bush ha consegido endeudar el país de una manera increíble, pasando de los más de 170.000 millones de dólares de superávit que le había legado su antecesor, Bill Clinton, a los 412.550 millones de dólares de déficit con el que se cerró el anterior año fiscal en EE.UU. Eso sin contar que es la primera vez desde el crack de 1929 que un presidente acaba un mandato con un descenso neto en el número de puestos de trabajo.

En el plano de la política exterior, el actual inquilino de la Casa Blanca ha conseguido pelearse con países que han sido tradicionales aliados como Alemania o Francia, no ha obtenido ni un solo avance en el conflicto palestino-israelí, no ha podido detener el peligro que supone la amenaza nuclear de Corea del Norte y está por ver todavía qué pasará en Irán.

En fin y queda el tema que quizás más ha ocupado a los norteamericanos durante la pasada campaña: la seguridad y la lucha contra el terrorismo. En este apartado resulta recomendable leer el libro "Contra Todos los Enemigos" de Richard A. Clarke. El autor fue lo que en Estados Unidos se denomino el "Zar antiterrorista" de los gobiernos de Clinton, anteriormente había trabajado para las administraciones de Bush padre, Ronald Reagan y durante más de un año también formó parte del equipo del actual mandatario. Pues bien, en este libro, a parte de comentar que durante el primer año de gobierno Bush no se prestó la más mínima atención al terrorismo (¡!), se hace un pormenorizado análisis de la política que se ha denominado de "Guerra contra el Terror".

Resulta curioso qué, en Afganistán, que era en donde se sabía que estaba la cúpula de "Al-Qaeda" sólo se enviaran sobre el terreno a unos pocos miles de soldados norteamericanos, (creo que sobre los 10.000). Mientras que en Iraq, que se sabía que no tenía nada que ver con la organización de Ben Laden, se encuentren actualmente más de 130.000 hombres, es decir, 13 veces más efectivos. Resultado, se consiguió detener a Sadam Husein, (cosa de la que me alegro), pero Osama y sus acólitos siguen por ahí, no se sabe muy bien donde, dispuestos a propiciarnos un daño como el del "Word Trade Center".

Resulta además irónico que, poniendo como excusa la lucha antiterorista, en Estados Unidos se hayan recortado las libertades. El presidente que dice que quiere extender la libertad en el mundo va y la reduce en su propio país mediante normas como la ley patriótica. Puede que parezca una tontería, pero por escribir un artículo como éste y titularlo como yo lo he titulado, si vives en en la nación de las hamburguesas, te la estás jugando a que te haga una "visita" el FBI y no es una exageración. Es más ¿en qué país occidental podría darse una situación como la de los presos de Guantánamo?

Si en España después de los atentados del 11 de Marzo el gobierno hubiera intentado llevar a cabo una política parecida a la de nuestros amigos del otro lado del athlántico, probablemente hubieran corrido a gorrazos a todo el Consejo de Ministros. Aquí en vez de poner coto a los derechos civiles la población y la administración se reafirmaron en sus valores democráticos, claro que, por desgracia, los españoles llevamos ya mucho sufrido con el terrorismo y parece que sabemos plantarle cara sin dejar que consigan cambiar nuestro sistema de valores.

Una pregunta para la reflexión en este tema sería, a pesar de los ingentes medios que tienen en Estados Unidos comparados con los que hay, por ejemplo, en España o Alemania, ¿qué países han detenido a más terroristas islámicos? Sinceramente, afirmar después de todo lo anterior que Bush es el que garantiza la seguridad de su país es, cuando menos, un ejercicio de ironía. Esperemos que la negligencia que ha demostrado la actual administración en este tema no se traduzca en más tragedia.

Por todo lo anterior es probable que la pregunta que encabeza este artículo se le haya pasado a más de uno por la cabeza. Yo creo sinceramente que no lo son, simplemente es un pueblo asustado y a los demás, como aliados y amigos que somos de, no lo olvidemos, la nación que ayudo librar al mundo de la amenaza nazi y protegió a occidente hasta derrotar al comunimo, nos toca el papel de tratar de aconsejar a un país que pasa por un trance por el que algunos de sus aliados ya estuvimos. Esperemos que esto contribuya un poco a que en los próximos cuatro años no se cometan los mismos errores. Por el bien de todos.

Actualización: Me han mostrado este curioso estudio sobre el coeficiente intelectual de cada estado norteamericano y el resultado que se obtuvo en las elecciones. Sin duda, da que pensar...